La iglesia se ha considerado el edificio más importante en la arquitectura europea, las ciudades cristianas se destacaron por sus iglesias y los castillos, los temas primordiales de la arquitectura eclesiástica pueden remontarse a la época cristiana primitiva.
Desde el principio las relaciones espaciales simbólicas fueron acogidas como punto de partida para la construcción de las iglesias en el cual se usan los conceptos de centro y recorrido significados existenciales básicos que acogieron una nueva interpretación cristiana, como es el caso de espacios centrales y longitudinales entre las cuales estas expresiones son las más representativas de la arquitectura romana.
El espacio centralizado era considerado un símbolo cósmico y una expresión de la nueva experiencia vivida por el hombre en el espacio, los espacios longitudinales de las basílicas tenían un doble significado debido a que el recorrido que simbolizaba el carácter intencional de la acción humana.
Estas dos formas fueron acogidas por la arquitectura paleocristiana en su comienzo la iglesia se baso en la basílica longitudinal y el espacio centralizado se uso para el baptisterio.
Se uso la planta central para los principales edificios eclesiásticos incorporando un eje longitudinal secundario es decir que las plantas de la mayoría de iglesias antiguas tienden hacer una combinación de la longitudinal dad y la centralización, prevaleciendo la longitudinal dad en occidente y la centralización en oriente.
Las iglesias paleocristianas están concebidas como mundos interiores como lugares que representan la ¨civitas dei¨ el exterior de las iglesias muestra esto o como es el caso su interior muestra todo lo contrario puesto que el visitante cuando entra se siente trasportado al reino de Dios un mundo cualitativamente diferente, el espacio existencial cristiano no es un entorno concreto del hombre sino que simboliza una promesa y un proceso de liberación.
Santa Sofía
Durante la revuelta de Niké en el año 532 la vieja basílica Constantina de la santa sapiencia quedo reducida a cenizas y Justiniano decidió construir una nueva iglesia, en el año 27 de diciembre del año 537 Santa Sofía Justiniano inicio la construcción de una nueva iglesia de los apóstoles para remplazar el Apostoleion de Constantino.
Se dice que el matemático Artemio de Tralles fue el arquitecto de los tres edificios que se construyeron en Constantinopla, también se dice que tuvo la ayuda del especialista Isidoro de Mileto.
La primera cúpula de Santa Sofía se derrumbo en el año 558 y después fue sustituida por una construcción más alta que fue finalizada en el año 562. Las grandes mezquitas son cúpulas construidas después de la caída de Constantinopla en 1453 son una combinación de estructuras centrales y longitudinales su elemento principal es el baldaquino central esto representa una síntesis convincente que no ha sido igualada, se obtiene una estructura de doble envolvente en la que los vanos principales aparecen rodeados por un borde luminoso. La cúpula principal tiene un diámetro de 30 metros y esta perforada en la base por una fila de ventanas, apoyada sobre pechinas soportadas por grandes columnas. Las columnas y los muros no están caracterizados como elementos estructuralmente diferentes como es el interior que está cubierto por unos panales de mármol y mosaicos, esta decoración forma un interior espiritualizado de una gran belleza iluminada por la luz que irradia el cielo y cae sobre los ángeles, el patriarca, el clero y el emperador. La luz y los colores son formas espaciales originadas desde la cúpula central. El exterior de la basílica Santa Sofía pasa a ocupar un segundo plano respecto al interior, pero el gran volumen de la cúpula domina la ciudad.
